Otro Accidente en Atracción Turística Pone en Entredicho la Seguridad de los Visitantes en Real de Catorce

Este fin de semana, la falta de medidas de seguridad en una atracción extrema en el municipio de Catorce quedó en evidencia cuando una mujer y un trabajador cayeron de una plataforma en lo que debió haber sido una experiencia controlada. El incidente, captado en un video que se viralizó en redes sociales, mostró la fragilidad del “columpio extremo” ubicado en el Hotel El Templo, un sitio que recibe miles de visitantes.
En el video compartido por Alessia Piña, la víctima, se ve cómo el seguro de la plataforma se zafa, provocando que el trabajador cayera al vacío, mientras que ella quedó suspendida en el aire gracias al equipo de seguridad. Aunque los empleados reaccionaron rápido para auxiliarla, Piña denunció la evidente falta de preparación ante emergencias: “Improvisaron la manera de ayudarme. Me ayudaron a subir de nuevo a la plataforma, incluyendo al muchacho accidentado, que yo creo lo único que lo movía era la adrenalina”, relató en su video.
Lo que sigue es aún más alarmante. No hubo paramédicos ni ambulancias en el lugar, y la atracción siguió operando minutos después del accidente. Ninguno de los responsables ofreció atención médica, ni se molestaron en preguntar por el estado de salud de la afectada. Alessia tuvo que viajar a Monterrey para recibir tratamiento debido a los dolores causados por la caída.
Para colmo, el jefe del personal justificó la situación alegando que los trabajadores se niegan a usar equipo de seguridad, una declaración que evidencia la negligencia que impera en la operación de esta atracción. No solo no se le ofreció ninguna compensación a Piña por lo ocurrido, sino que tampoco hubo un mínimo interés por su bienestar: “No me devolvieron absolutamente nada de lo que pagué, ni preguntaron sobre mi estado”, denunció.
Este incidente es solo uno más en una lista creciente de accidentes relacionados con atracciones turísticas extremas en San Luis Potosí. Hace apenas un mes, el 8 de septiembre, un guía de turistas perdió la vida al caer de una tirolesa de más de 50 metros de altura en las Cascadas de Micos, en Ciudad Valles, administrada por la empresa Adventureland. A raíz de ese trágico evento, la tirolesa fue clausurada, y recientemente la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC) también cerró otra tirolesa de la misma empresa en Xilitla, por no cumplir con las medidas de seguridad.
Es alarmante que lugares que reciben a miles de visitantes, incluidos niños, sigan operando sin las medidas de seguridad necesarias. Las autoridades deben tomar cartas en el asunto y exigir estándares más estrictos para evitar que estos lugares sigan poniendo en riesgo la vida de las personas. ¿Cuántos accidentes más se necesitan para que se tomen medidas reales? Hoy, Alessia Piña puede contar su historia, pero ¿qué pasará cuando la negligencia cobre una nueva vida?