Mientras los abogados y trabajadores del Poder Judicial defienden la autonomía del organismo; a los políticos de Morena también les dan ganas de manifestarse el mismo día para defender la reforma de su patrón.
La mañana del martes, San Luis Potosí se convirtió en el escenario de una protesta con un toque irónico que no pasó desapercibido. Trabajadores del Poder Judicial Federal (PJF) provenientes de Zacatecas llegaron a la capital potosina en su ruta hacia la Ciudad de México, con el objetivo de frenar la propuesta de reforma constitucional al Poder Judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Hasta aquí, todo normal. Un grupo de trabajadores defendiendo la independencia judicial en medio de consignas y pancartas. Sin embargo, la trama tomó un giro más teatral cuando, horas después, otro grupo de manifestantes, encabezados por políticos locales de Morena, irrumpió en escena para apoyar la reforma.
Los primeros en alzar la voz fueron los trabajadores del PJF, quienes se congregaron en el parque Morales. De ahí, una caravana de 400 personas marchó sobre la avenida Venustiano Carranza hasta llegar al Centro Histórico. “No estamos defendiendo privilegios, estamos defendiendo a México”, gritaban los manifestantes, liderados por personajes como Roberto Vega Turrubiartes y Francisco Uribe Ortega.
Con todo el fervor de su lado, los manifestantes hicieron un llamado a la sociedad para defender la autonomía judicial. Entre sus declaraciones, destacaba el temor de que los jueces elegidos por voto popular caigan en manos de intereses políticos y hasta criminales.
Todo parecía una clásica protesta hasta que, de manera casi coreográfica, apareció la contramarcha. Justo cuando los ecos de las consignas judiciales resonaban en Plaza de Armas, llegó el turno del “equipo de respaldo presidencial”. Entre banderas y discursos bien ensayados, un grupo de simpatizantes de la reforma judicial, liderado por los diputados Carlos Arreola, Roberto García y Cuauhtli Badillo Moreno, se hizo presente. ¿Desde cuando se manifiestan los políticos?🤔😄
“Es por el bien del pueblo”, defendió Donatiu Hernández, quien argumentó que el sistema actual beneficia a una élite judicial, y que la reforma es necesaria para acabar con los privilegios. Con una seguridad envidiable, aseguraron que el voto popular es la solución para que personas más “humanas” ocupen los cargos judiciales.
La escena tenía todos los elementos de un buen espectáculo: una protesta legítima opacada por una contramarcha organizada por figuras políticas, en un intento casi desesperado por justificar una reforma que, según sus críticos, podría comprometer seriamente la justicia en el país.
Así, en pleno Centro Histórico de San Luis Potosí, se escenificó un drama político que bien podría haber sido un ensayo general de lo que veremos en las próximas semanas en la Ciudad de México. Porque si algo quedó claro es que en esta “obra”, los actores están listos para seguir dando función, pero el final aún está lejos de escribirse.