La familia Fortanelli, concesionaria del paraje Cascadas de Tamasopo, ha sido blanco de críticas en las redes sociales por el aumento de precios y las restricciones impuestas para la próxima Semana Santa, entre ellas el costo de entrada se ha incrementado casi al doble, pasando de 90 a 160 pesos por persona, además, se prohíbe el ingreso de diversos artículos, como chalecos salvavidas, hieleras, alimentos y bebidas, lo que ha generado molestia entre los visitantes.
Las nuevas disposiciones también incluyen restricciones para el uso de cámaras profesionales, drones y casas de campaña. Estas actividades ahora requieren un permiso especial y un pago adicional. El estacionamiento también tiene un costo de 100 pesos por vehículo, y no se permite el reingreso al paraje. Si un visitante sale y desea volver a entrar, deberá pagar nuevamente la entrada.
Los usuarios en redes sociales también han cuestionado la falta de transparencia en el manejo de los recursos del paraje. Señalan que la familia Fortanelli ha construido cabañas, zonas de camping, restaurantes y tirolesas sin la autorización correspondiente, lo que ha impactado negativamente al ecosistema de la zona.
Las críticas han derivado en una protesta virtual en la que los usuarios han decidido no visitar las Cascadas de Tamasopo durante Semana Santa. Esta decisión podría afectar a los comerciantes y prestadores de servicios turísticos locales.
Hasta el momento, las autoridades de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Secretaría de Turismo no han intervenido para regular los precios, costos y verificar los daños ambientales en el paraje.
