El Frente Marea Verde invita a las mujeres a manifestarse en el marco del 28S “Día de Acción Global por la Despenalización del aborto” luego de que se lograra dicha causa recientemente ante  la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), lo que obliga a todas las entidades del país a agilizar el cumplimiento de dicha reforma. 

El 28 de Septiembre se identifica como un día de lucha por la justicia social de los Derechos Sexuales y Reproductivos de las Mujeres, conmemorando principalmente la lucha por la despenalización del aborto, en el caso de San Luis Potosí las colectivas, activistas, organizaciones, académicas, investigadoras, periodistas y artistas del Frente Marea Verde, invitan a las mujeres potosinas a manifestarse ese día en la Plaza de Armas a partir de las 5:00 p.m. 

Esta manifestación se lleva a cabo en México y otros países desde el año 1990, a nivel local podrían ser un par de décadas después que comenzó a realizarse dicha marcha y es la primera vez que se llevará a cabo en medio de la aprobación de un aborto legal y seguro en San Luis Potosí, para ser implementado como un problema de salud pública y de derechos humanos.

Esta conmemoración surgió un 28 de septiembre de 1871 en Brasil con la declaración de la “Ley de libertad de vientres”, que consideraba como libres a todos los hijos de las mujeres negras esclavas, con la cual se daba fin a la “esclavitud heredada”; años después, concretamente en 1990 las mujeres afrobrasileñas tomaron esta fecha histórica como símbolo de la lucha por el derecho al aborto. A partir de 1990, se alza la voz por derechos sexuales y reproductivos, entre ellos, la libre elección de interrumpir voluntariamente el embarazo y la exigencia a tener un acceso legal y en condiciones seguras. 

La OMS estima que aproximadamente se realizan 25 millones de abortos peligrosos al año, convirtiendo esta práctica en la primera causa de muerte materna y en San Luis Potosí se estima que podría ser la cuarta razón principal de este tipo, por lo que con la despenalización se busca que se reconozca más allá de un asunto de opinión religiosa o moral, como un derecho fundamental para todas las mujeres.